19 de abril

Salud

Se reiteran recomendaciones para evitar accidentes por pirotecnia durante las Fiestas

La Municipalidad de Rosario recuerda que su uso y comercialización están prohibidos; puede provocar lesiones irreversibles. También se sugieren medidas preventivas para animales de compañía

La Secretaría de Salud Pública municipal recordó que los accidentes por manipulación de pirotecnia pueden provocar quemaduras, mutilaciones o lesiones graves con consecuencias irreversibles en algunos casos. Además, el ruido generado por pirotecnia y fuegos artificiales afecta especialmente a personas con condiciones del espectro autista.

Independientemente de que algunos elementos sean permitidos, no deben ser utilizados por niños o niñas incluso con supervisación de adultos.

En caso de quemaduras por pirotecnia, es fundamental concurrir en forma urgente a un centro asistencial o llamar al Sies 107 (Sistema Integrado de Emergencia Sanitaria).

En este sentido la Secretaría de Salud Pública recuerda:

-Evitar que niños y niñas utilicen estrellitas y bengalas ya que pueden provocar daños oculares, incluso quemaduras de consideración.

-En caso de quemaduras por ignición de la ropa, sofocar el fuego con una frazada o hacer rodar a la víctima por el piso. Advertir a la víctima que no corra y no colocar ningún tipo de cremas, ungüentos caseros, pasta dental o pomadas a fin de evitar infecciones.

-Del mismo modo, cuando los ojos resulten comprometidos con traumatismos o quemaduras por pirotecnia no se deben tocar ni aplicar absolutamente nada. En caso de ser afectada otra parte del cuerpo, sumergir la zona lesionada en forma urgente en agua fría, lavarla luego con jabón y agua limpia, cubrir la zona con toallas limpias y trasladar al paciente al Centro de Salud más cercano.

Las lesiones más comunes son quemaduras que pueden afectar distintas partes del cuerpo, siendo la cabeza, el cuello y las extremidades superiores las más frecuentes localizaciones.

La pirotecnia y los fuegos también afectan a los animales de compañía: pueden generar un grave impacto, sobre todo en perros y gatos, provocándoles palpitaciones, taquicardia, temblores, náuseas, jadeo, desorientación y ataques de pánico, entre otros síntomas. Los efectos en los animales son diversos y de diferente intensidad y gravedad.

Los animales tienen un oído sumamente delicado y agudo, escuchan hasta 60 veces más que los humanos y por ello los estruendos provocan que se escapen en busca de protección quedando expuestos a accidentes o a extraviarse.

Entre otras recomendaciones se recuerda:

-Proteger los oídos de los perros y gatos con tapones de algodón que reduzcan los ruidos.

-Nunca dejar a los animales atados,

-En caso de que el animal quede solo en el domicilio es importante dejar un ruido de fondo como la radio o el televisor encendidos para atenuar eventuales explosiones.

-Es importante que los animales no tengan acceso a patios y balcones ya que en un estado de alteración pueden arrojarse al vacío.

-No utilizar jaulas.

-En el caso de utilizar una medicación es fundamental hacer la consulta con el veterinario.

-Para evitar un escape, buscar un lugar seguro, como por ejemplo una habitación no muy pequeña donde el animal previamente se sienta cómodo para que descanse.